Muchas veces oí la historia del mítico puente que Richard Burton había hecho construir para unir su casa de Puerto Vallarta con la de su amante Elizabeth Taylor. Dos vidas de estrella, unidas por una historia casi de Walt Disney, hacen una exótica película de título sensual: “La noche de la iguana”, y ponen a un pueblo de pescadores en la mira del turismo internacional transformando el destino.
En mi reciente viaje a Vallarta propuse ir a conocer el dichoso puente. Mi amiga Deborah, que ya lo conocía, no me previno de la desilusión que podía llegar a sufrir. Luego de perdernos algunas veces, pedir numerosas indicaciones y finalmente arribar, le pregunté: “¿ ESTO es el puente?”. Ella dijo: “creo que sí”, como disculpándose.
Cada día admiro más a los empresarios de Hollywood.
Puerto Vallarta, Jalisco, México, octubre 2012