Muy entusiasmado, él estaba hablando de los años en que había estudiado para piloto.
Me sorprendí de que fuera piloto, entonces pregunté entusiasmado:
- ¿Sabés volar un avión? ¿Es difícil?
- Para nada – dijo él -. El primer día te lo dan para volar, después, sólo tenés que sumar horas.
Ricky Bunader, Buenos Aires, junio 2010
No hay comentarios.:
Publicar un comentario