Encontré esta botella en el baño de un amigo. La botella decía, en inglés: “Baby Grace, gel de baño perfumado para mujeres que quieren oler como un bebé”.
Le pregunté a mi amigo qué hacía eso en su baño. Me contestó que ni idea, que no era de él, que seguramente alguna visita se lo había olvidado.
Me encontré entonces con el siguiente dilema: ¿quién es más perverso? ¿Mi amigo que niega el producto? ¿La mujer que quiere oler como un bebé? ¿O el tipo que se quiere coger a una mujer que huele como un bebé? Porque si esta cosa se fabrica, es porque alguien la consume: mi amigo, la mujer, o el pedófilo encubierto que se la coge.
Días después me encontré con este afiche de una película:
Nuevamente: el nombre “Grace”, la idea del bebé, y el manto siniestro que los envuelve.
La gente me da miedo.
Julio 2010
1 comentario:
muy bueno el cierre: "la gente me da miedo"... excelente.
saludos
Mariana
Publicar un comentario