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Por medio de un gran cartel, una tienda de jardinería en la carretera ofrece “plantas artificiales” y “piedras decorativas”.  Transpolo la oferta a una descripción humana. Si alguien tratara de insultarme utilizando alguna de estas denominaciones ¿qué sería para mí más ofensivo?

Villajoyosa, Alicante, España, junio 2015