2013-01-08



Situaciones incómodas en un baño público pueden ocurrir muchas.

Ésta en particular consiste en que, cualquier sujeto del sexo masculino que tenga la predilección de orinar de pie, se expone a que, durante todo el tiempo de la micción, y encontrándose en el alcance del sensor del expendedor del papel seca-manos, éste no dejará de activarse hasta que la última gota caiga y el sujeto masculino se retire (pisando el papel en el piso).

Casa de las Sirenas, Centro Histórico, México DF, diciembre 2012



Siempre me ha llamado la atención que muchas personas visten prendas que no les quedan.

Luego de una excursión por los alrededores del Eje 1, antes de entrar a Tepito, descubrí que la mayoría de las tiendas con las buenas ofertas no sólo no tienen local, sino que tampoco proveen un espejo o permiten que la gente se pruebe la prenda que compra. Por si esto fuera poco, las grandes ofertas no admiten devolución.

Comprar un pantalón se vuelve así un acto de fe.

Lo que me cuesta creer es que la gente tampoco tenga espejo en la casa, y si lo tiene, decida lanzarse a la calle con su malograda oferta a pesar de la imagen que el espejo devuelve.

Centro, México DF, diciembre 2012



He visto frentes pintados, revestidos en madera o granito, de laja y de concreto, pero esta tendencia en la arquitectura urbana es la que más me sorprende después de los frentes verdes o jardines verticales.

Centro, México DF, diciembre 2012

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En el suelo hay un hueco con tierra y plantas.

Con el tiempo, los transeúntes las van pisoteando hasta aniquilarlas.

El dueño del local decide hacer una rejita para protegerlas.

No es suficiente: las maltratan, las roban.

Entonces deciden tapar el cantero y hacer una base para apoyar macetas (que ponen durante el día y retiran para guardarlas durante la noche).

La muchacha que atiende el local es chaparrita, y cada vez que se agacha a colocar o retirar la maceta, se raspa las axilas.

Su novio le consigue una superficie de conglomerado de segunda mano para que ella apoye la maceta sin tener que agacharse.

En el hiperespacio hay un hueco sin tierra ni plantas.

Centro, México DF, diciembre 2012



El marco: divino. Las flores: un primor. ¿Pero qué onda con la rodilla derecha de esa criatura?

Galería de Arte, Calle Honduras, Lagunilla, México DF, diciembre 2012



(foto: Rodrigo Medeiros)

Ojalá que Santa Claus tenga seguro contra terceros y responsabilidad civil.

Brasilia, diciembre 2012



A ver ahora, alguien que se atreva a perder la fe.

Catedral de México, diciembre 2012



Tanta grandilocuencia, tanto exceso de humedad, y la pobre plantita se les está secando…

El Llano, Oaxaca, noviembre 2012



Yo creo que es un buen lugar para sentarse a descansar.

Puebla, México, diciembre 2012



No sé si el “sorteo de un auto” dentro de una iglesia no tendrá algo de pecaminoso… ¿o la idea me la inspira el círculo de mortales que se queman a los pies de Jesucristo?

Por las dudas, el Papa ya está junto a la línea de partida: “Preparados… en sus marcas… listos…”

Nuestra Señora de Ocotlán, Puebla, México, 25 de diciembre de 2012

2013-01-07



En esta iglesia encontré un Jesucristo donado por Linda Evans en los 80’s.



















Nuestra Señora de Ocotlán, Puebla, México, 25 de diciembre de 2012



El desarrollo del espacio recreativo Los Fuertes en Puebla es un logro maravilloso: árboles, andadores, vistas, fuentes, monumentos, cuerpos de agua. Mucha gente lo visita y se vuelve un lugar, además de atractivo, feliz.

El único punto donde tengo un poco de crisis es en los puestitos de comida que están frente al laguito. ¿No les alcanza con haber tenido la fortuna de obtener una de las escasas concesiones para vender comida JUSTO frente al lago, que encima tienen que usar bocinas que atraviesan la prístina mañana comunicando el menú? ¿Por qué tengo que mirar el horizonte, fotografiar a los patos, y admirar la reverberancia del agua junto al estruendo de las palabras “cemita”, “gansito”, “hot dog”, y “nieve de guanábana”?

Los Fuertes, Puebla, México, 25 de diciembre de 2012



Es verdad.

En la cena de Nochebuena nos acompañó un video de Youtube que, durante 10 horas sin parar, tocaba la canción “Repican las campanas” (y vaya que repican).

Puebla, México, 24 de diciembre de 2012



Estos inflables decorativos modernos proveen una lectura muy ad hoc sobre la temporada de fiestas navideñas:

- ¿Santa Claus y el reno Rodolfo descansan de día para repartir los regalos de noche?
- ¿O es que salieron pedos de la posada la noche anterior y se desplomaron luego de vomitar junto a la puerta de entrada?

Cualquiera que sea, en estas fiestas yo me siento como Santa Claus y el reno Rodolfo.

Puebla, México, diciembre 2012



Lo que en el Renacimiento llamaban “punto de fuga”.

Centro, Ciudad de México, diciembre 2012



¿Es un ave? ¿Es un avión? ¡No! ¡Es Superman! (el que se lo está preguntando)

Reforma y Bucareli, Col. Tabacalera, Ciudad de México, diciembre 2012



Yo creo que, si una civilización extraterrestre hubiera decidido poner las oficinas de su nave nodriza enfrente del antiguo edificio del siglo XVIII, no lo hubiera hecho de manera tan tosca.

Ribera de San Cosme, Col. Santa María de la Ribera, Ciudad de México, octubre 2012



Junto a la familia queda el alma de las pobres desgraciadas que ya fueron comidas.

calle República del Salvador, Centro Histórico, Ciudad de México, diciembre 2012



Me emocioné mucho cuando vi una de las famosas esculturas de mármol de Daniel Alatorre a la entrada del hotel Gillow.

Me desilusioné cuando descubrí que el objeto no era de mármol.

Volví a emocionarme al concluir qué maravillosa se vería, allí mismo, una de las famosas esculturas de mármol de Daniel Alatorre.

Hotel Gillow, Isabel la Católica y 5 de Mayo, Centro Histórico, Ciudad de México, diciembre 2012




Daniel Alatorre - Escultura mármol blanco


Espero que esté hincado pidiendo a la Virgen que no lo deje caerse. Se me hace más lógico que estar atendiendo un mensaje de texto en semejante momento.

Centro Histórico, Ciudad de México, enero 2013



Calculo que el 63% de la fortuna de Slim se basa en las llamadas que la gente realiza, desde sus celulares Telcel, a las personas que se encuentran en el interior de las viviendas donde no funcionan los porteros eléctricos.

En ausencia de fondos para realizar reparaciones, la administración del edificio le dice a los vecinos que el que quiera tener timbre va a tener que poner el suyo propio. Los vecinos los instalan, y luego los transeúntes mal intencionados se birlan los dispositivos. Los vecinos los reemplazan, hasta el cansancio, para finalmente concluir que el mantenimiento del timbre individual es más caro que reparar el portero eléctrico. Es entonces que la gente decide que NO hay timbre, y quien los visita les debe hablar a su celular.

Por no mantener los porteros eléctricos, entre todos mantenemos a Slim.

Centro Histórico, Ciudad de México, mayo 2012



Al principio pensamos que éramos nosotros que no entendíamos el argumento, pero finalmente la historia del muchachito que hacía remo no tenía ningún tipo de conexión con los deportes hípicos. Fue en este punto donde decidimos ya no ver la película (estaba mal traducida: seguramente con uno de esos programas a los que le alimentan la transcripción del guión y luego nadie revisa el resultado de la traducción antes de mandarla a los subtítulos).

“Regata”, 2012



Lo único que falta: encima de que no recogieron sus constancias (hoy), ¡que la toquen y le griten!

Qué mundo machista, pobre Edith.

Ciudad de México, 14/dic/2012